El ajonjolí, o semilla de sésamo, es un pequeño gran aliado nuestro para tratar diversas molestias del cuerpo. El ajonjolí,con tiene un alto contenido de aceite insaturado, lo que es beneficioso para el ser humano. Dentro de este aceite está la lecitina, una grasa “buena” que ayuda a disolver la grasa “mala” que ese encuentra depositada en nuestras arterias y así nos ayuda a evitar la terrible enfermedad de la arterioesclerosis.
Otro beneficio muy positivo de esta pequeña, pero poderosa semilla, es su alto contenido de calcio. Se ha comprobado que en solo 100 gramos de ajonjolí se encuentran 670 mg de calcio, superando, de esta manera, a la leche, que en 100 gramos solo aporta 110 mg. Entonces, el ajonjolí se convierte en una fuente muy buena de calcio y más para las madres gestantes y niños pequeños.
Otros usos que se le puede dar es para luchar contra el estres, el cansancio y el insomnio.
Quiero empezar a consumir ajonjoli para controlar el colesterol, pero leí que en algunos casos puede provocar efectos secundarios como dermatitis de contacto o atópica, rinitis alérgica y asma.
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